Chardonnay Blanca María

A primera vista este vino blanco claro, limpio y brillante muestra lágrimas de caída lenta, glicéricas, de las que se adivina una agradable untuosidad en boca.
Los seductores reflejos dorados, otras veces acerados, junto al pálido limón, dan muestras de un color aún en evolución.

Los aromas se perciben limpios, con intensidad y complejidad moderadas y carácter puramente frutal.
La delicadeza de aromas de la fruta blanca madura, como la manzana y la pera, junto con el aroma, algo más generoso, de la fruta de hueso, como el melocotón, constituyen la esencia aromática de este joven vino.

La notable acidez cítrica de este Chardonnay seco es el contrapunto ideal para el efecto oleoso del alcohol. Y es, justamente, esta delicada sensación untuosa sumada a la textura cremosa de la fruta, tipo melón, la que  da cierto volumen y sensación de peso a este vino. Se reproducen en el paladar, aromas a melocotón y albaricoque con llamativa intensidad y persistencia. El discreto amargor final, la sensación glicérica del alcohol y el aroma frutal "estiran" el recuerdo y la sensación del vino en la boca infinitamente.

Este vino, de unos 6 a 10€, de medidas armoniosas, y de el que solo se han producido 4.300 botellas, ya está listo para su consumo. Tomado a temperatura fresca, en cualquier época del año, se aprecia un claro ejemplo de como la francesa Chardonnay, acostumbrada a producir vinos de alta gama,  se ha adaptado, perfectamente, a la especial localización de los Viñedos y Bodega Marcelino Serrano en plena Sierra de Jaén. La orografía del terreno y el particular microclima de la zona dotan a este Chardonnay de elegantes cualidades.
Entrantes, pasta, pescados, quesos y carnes blancas junto a Blanca María harían una delicia.

BLANCA MARÍA
100% Chardonnay
Origen: IGP Sierra sur de Jaén
Viñedos y Bodega Marcelino Serrano
Alc 13,5%
Precio: 6 a 9€
Producción: 1.400 botellas.
Encuadrado junto al Marcelino Serrano en la serie de vinos de autor.