Como ya te apuntamos en el anterior post: El vino y su relación "tóxica" con algunos alimentos hay platos que son auténticos enemigos del maridaje, en tanto que presentan una dificultad importante a la hora de encontrar un acompañante idóneo.
En estos casos te recomendaríamos beber sólo agua pero mejor será proponer algunas posibilidades viables con vinos.
Aquí nuestra propuesta:
- Vinagre, vinagretas o ensaladas avinagradas. Vinos blancos ácidos, frescos y ligeros. Fino o manzanilla.
- Helados. Recomendamos vinos dulces de Pedro Ximénez o Moscatel y cavas semisecos.
- Alcachofas: debido a su gran astringencia, algún oloroso ligeramente abocado podría resultar.
- Huevo. Un vino tinto joven y suave es una buena opción.
- Alimentos salados. Vinos con poco alcohol y frescos y ligeros.
- Alimentos con demasiado condimento o especias. Algún vino afrutado o ligeramente dulce.
- El ajo. Vino blanco suave o tinto de sutiles taninos.
Esperamos haberte solucionado algún "conflicto" entre platos y vinos.